lunes, 21 de marzo de 2011

Ignominia

Registrado en Safe Creative


Viví entre prolíficas vides ensombrecido
Creciendo de atisbos de sol colado entre las ramas
Y de tan pequeña luz, mis brotes.

Mientras peleaba con dragones de fantasía
Que eran para mí tan reales como mi propio pánico
Mientras las vides exhibían orgullosas sus frutos

Yo me consumía en delirios y era anatematizado por mis congéneres
Empeñados en tareas más justas
Más civiles y menos ficticias.

Cuando el tiempo había sido el suficiente
Retumbaron los truenos de los rayos de Zeus
En imprecaciones de toda índole

Y aunque el anatema continuaba, se me pidieron frutos
Se me pidieron como lo obvio, como lo debido
Y yo a los hondazos con mis dragones intenté ser savia

Intenté ser vida, de una forma tal que llegué a desangrarme
Se me hicieron callos los sentidos, pues sufrir más, era la muerte
Simbolicé al mundo en ecuaciones y estadísticas.

Me avejenté, como un inmortal que ya hubiese olvidado su nacimiento
Y fui opacidad, temblores, se me apagó el mundo tan pobremente significado
Y nadie veló mi pena, y muchos pisotearon mi vegetalidad y mi dolor.

En mi espejo vieron desidia, pobreza, orgullo, pero nunca vieron justamente
No pudieron ver cómo me escarnecía el luctuoso sino
No les fue posible hacer un alto en su prosperidad y mirar más detenidamente.

Estoy a la deriva y me han desposeído hasta de mis lágrimas
No tendré mejor suerte, pues llevo a cuesta mi propia historia
Por eso, aunque me hunda en la ignominia, voy a ser siempre capaz de ver en la cara del hermano, el dolor.

miércoles, 9 de marzo de 2011

Registrado en Safe Creative


No soy esta apariencia equilibrada
Esta amable constelación corporal
Yo soy en lo profundo un monstruo verde
De hediondas babas y costumbres reptiles

Ese bicho irracional empuja mis ideas más esforzadas
Las desacomoda, las mezcla, vomita sobre ellas
Ese insecto se llama miedo
Vulgarmente miedo, quiere nuestra muerte y no

La quiere porque conspira para conseguirla
Y no, porque le teme a la nada
Ya ven, comencé escribiendo yo y ahora
Arañándome desde dentro escribe él

La esperanza es un puente tendido entre ambos
Cada día más débil, cada día más fuerte
Cada día es un escándalo de tortura
Arremetemos uno contra el otro insensiblemente

Son treinta y dos años ya de agonía
Son treinta y dos años de dichas
Es insoportable esta locura maldita
Clave de nuestro presente isla

Nuestro presente al margen;
Y aunque no estamos solos,
Únicamente nos tenemos ambos,
Esta dualidad es el solipsismo consumado

Si por lo menos fueses vida, muerte
No lo dudaría un instante
Si por lo menos fueses consuelo, muerte
Me entregaría a tus designios; si es que ya no me he entregado.